Atenas y Esparta: el mito.

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Hay un lugar, nacido en mito, que la historia ha llevado al mundo de los hombres: las puertas calientes. Porque? Porque a partir de aquí comenzó el estudio de la historia antigua, de lo que Herodoto y Tucídides, dos de los más grandes historiadores de la antigüedad, transcrito de las historias de estos lugares y las acciones de estas personas con el propósito de decirnos posteridad los orígenes de nuestra historia. Antes de decirle las puertas calientes, tienes que dar un paso atrás, en 490 a. c.. Cuando los griegos, reunidos, lograron bloquear el primer persa avanzado: Según la leyenda, Funcionarían Filípides desde Maratón a Atenas para anunciar la victoria y opciones iba a morir por el esfuerzo. Diez años después, en 480 A. C., el rey persa Jerjes intentó una segunda invasión de Grecia, a la cabeza de un ejército: 70.000 Según los historiadores, 300.000 Según los griegos, más de 1 millón según los dioses. Mientras que Xerxes era hacia el sur, un ejército de griegos formado por todas la ciudad-estado se volvió hacia el norte: el ejército conducido por el rey espartano Leónidas consistió en 7.000 hombres, de los cuales 300 Spartans, luego los Tebanos, El phocians, Locrians y hoplitas atenienses. El campo de batalla fue las puertas calientes, un paso estrecho en el norte de Attica, que resultó para ser estratégico para impedir el avance de los persas. La historia de la batalla entre el ejército más grande del mundo, el Persa uno, y las fuerzas griegas pequeñas es una mezcla de historia y leyenda: al final de la batalla el 300 los espartanos dirigidos por Leónidas consiguieron bloquear el avance de Jerjes a costa de sus vidas. Los persas, ante la imposibilidad de entrar por tierra, decidieron eludir el Ática para atacar por el mar. En su camino, en la bahía de Salamina, a pocos pasos de Atenas, encuentra esperando el ateniense Temístocles general la flota ateniense de Trirremes. Temístocles maniobras Golfo estrecho tomaron ventaja de la velocidad de pequeños Trirremes griegos siendo capaces de destruir grandes persianas de naves. En Repsa quedó sin opción pero retirar. La gesta de Leónidas y sus espartanos, Temístocles y su flota entraron en la historia, mantener la promesa hecha por Temístocles a sus soldados antes de la batalla contra Xerxes: "resistir y usted entrará en la historia, Estás en mito porque usted griegos ".

Roberto

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